Las organizaciones han ido evolucionando y respondiendo a las condiciones del mercado, el impacto de la tecnología y la mezcla de generaciones en el ambiente laboral. Nos encontramos ante un entorno volátil, incierto, complejo y ambiguo donde abunda la inmediatez y la velocidad del cambio impulsado por el desarrollo tecnológico.
En el entorno actual, el clima organizacional empieza a ser percibido como una tendencia social que ayuda a las empresas en el círculo virtuoso de la atracción y retención del mejor talento incidiendo directamente en los resultados y la productividad.
Los elementos intangibles de la organización constituyen la base de su reputación cada vez en mayor medida, por lo que se consideran un diferenciador y una ventaja competitiva estratégica. La guerra de talentos es una realidad, el compromiso de los equipos de trabajo marca una diferencia entre organizaciones competidoras.
Las nuevas generaciones de trabajo empiezan a considerar como factor de análisis al aceptar un trabajo el ambiente laboral de la empresa a la que son candidatos, impactando incluso desde el proceso mismo de entrevista del candidato y la forma en que percibe su trato (equidad, rapidez, calidez, etc).
Para potencializar el prestigio social, la empresa debe contar con la recomendación individual (el famoso boca a boca), pero también debe contar con un respaldo que lo acredite como una empresa en que la gente prefiere trabajar por el buen ambiente laboral.
En este sentido la importancia de instituciones como Great Place to Work ha crecido en los últimos años al permitir utilizar un leguaje común sobre los temas relacionados al clima organizacional y poder comparar en forma estándar las diferentes empresas en cada rubro y en forma global a través de un modelo conceptual.
Actualmente esta encuesta tiene un alcance de 40 países participantes cada año más de 3,800 organizaciones utilizando esta metodología para conocer, e igual de importante, dar a conocer cómo es el ambiente laboral en su organización.
El tema de la Responsabilidad Social es otra de las grandes tendencias sociales, no sólo es importante el que mi empresa este bien, sino que esto se refleje hacia la comunidad en donde existimos; las nuevas generaciones poseen un gran énfasis en el impacto que tienen en el mundo y como contribuyen a dejar un mejor lugar que el que están recibiendo, la preocupación medio ambiental, el desarrollo de las comunidades, y en general lo que la empresa hace por su entorno con la participación de sus colaboradores es fuente de compromiso y orgullo de pertenencia.
En nuestro país el tema de Responsabilidad Social ha crecido en forma exponencial desde el 2001 en que el Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI) certificó 17 empresas en todo el país que acreditaron más de 300 indicadores que van desde la calidad de vida en la empresa hasta la vinculación y compromiso con la comunidad, a un incremento en 2016 de 1,413 empresas.
Adicional a estas dos prestigiosas instituciones la mayoría de los tipos de industrias cuentan con sus propias certificaciones ligadas a sus actividades distintivas, que las acreditan como las mejores en su ramo de especialización y por lo tanto las convierten en atractivos lugares para trabajar.
Esto nos pone de manifiesto que el Clima Organizacional y su proyección tanto interna como externa son una clara Tendencia Social que marca el diferenciador entre las empresas que utilizan como herramienta el clima organizacional para generar sus ventajas competitivas en un mercado cada vez más complejo.